Actualmente se estima que alrededor de 40% de la población tiene ansiedad o ha sufrido ansiedad alguna vez.
Esta cifra sufrió una variación cuesta arriba a raíz de la pandemia, situación que, era de esperarse, ya que el aislamiento, el miedo y el cambio drástico de las dinámicas diarias iban a ser un detonante de la ansiedad. El ser humano siempre tiene resistencia al cambio y, también incertidumbre a lo nuevo.
Primeramente quiero que comprendas un poco sobre que es la ansiedad para poder entonces descubrir de dónde proviene.
La ansiedad es el exceso de preocupación por realizar las cosas de la mejor manera posible y por agradarle a los demás. Es decir, hacer todo lo posible por no perjudicar a nadie ni con un respiro, a esto yo le llamo “el síntoma de las personas más nobles del planeta”, ya que alguien que se preocupe por todo y por todos es porque es demasiado bueno como para hacerle daño a una hormiga. Solo que los pensamientos van hacia lo peor porque la mente necesita reproducir los posibles escenarios negativos para cuidarnos, pero cuando la mente emite pensamientos negativos, las sensaciones también lo serán.
La ansiedad tiene el trabajo de protegernos ante un posible peligro, ya sea real o imaginario, solo que cuando esta se sale de control, puede causarnos problemas.
Desafortunadamente no se puede dar un diagnostico del porque las personas sienten o desarrollan más ansiedad que otras. Por experiencia propia, puedo deducir que muchos de los síntomas de la ansiedad se han heredado de alguna u otra forma de los padres.
La madre forma un papel fundamental en el desarrollo emocional del niño/a, así como la gestión de las emociones. Si la madre vive el embarazo desde la angustia, la preocupación, el miedo o la violencia, es probable que su hijo/a nazca con estos sentimientos ya desarrollados.
Esto no quiere decir que sea culpa de mamá la ansiedad que desarrollas, pues mamá también vivió un ambiente negativo que hizo que ella tuviera estos sentimientos y así, la cadena nunca termina, hasta que hacemos consciencia de lo que en realidad nos perjudica y decidimos sanar nuestras heridas, para no seguir heredándolas de generación en generación.
En conclusión, la ansiedad puede tener un origen en la herencia genética o emociones condicionadas y las experiencias de vida que te han tocado vivir (traumas del pasado).
Corrientes científicas como la epigenética demuestran que la ansiedad está en nuestros genes, esto significa que tienes más tendencia a experimentar ansiedad si tus padres o abuelos han sufrido de ansiedad. Esto no quiere decir que la información genética va a determinar por completo como vas a experimentar la ansiedad, pero la verdad es que sí influye.
La ansiedad tiene la capacidad de activarse como resultado de las experiencias e interacciones con los demás. A lo mejor en tu niñez, o a lo largo de tu vida, has visto a personas reaccionar con muchísima ansiedad ante ciertas situaciones y tú, sin darte cuenta, también reaccionas así. O puede ser el caso que hayas vivido situaciones de mucho miedo o de mucha inseguridad en tu pasado, que hicieron que esos genes de ansiedad se activaran y le dieran la bienvenida al miedo irracional y a la falta de seguridad en ti mismo.
Todo lo que vivimos, la historia de nuestros antepasados, nuestra cultura, el paso por las escuelas, lo que hemos escuchado y visto, nos ha colocado en este punto.
Pero no te preocupes demasiado, la clave está en cómo nos vemos a nosotros mismos y lo capaces que podamos ser para afrontar los problemas y retos de la vida, la cual, como gran maestra que es, nos ha dado un gran desafío para, de esta forma, ponernos a prueba y hacer que nos edifiquemos a través de este síntoma que siempre termina por iluminarnos.
Actualmente existen muchas técnicas altamente efectivas de autosanación y gestión de las emociones, las cuales te ayudarán considerablemente a debilitar los síntomas de la ansiedad, pudiendo así llevar una vida plena y en armonía, sin temor a vivir.
Es por ello que he creado una herramienta de autosanación, “ De la ansiedad a la iluminación”, este es mi primer libro, una guía detallada en la cual podrás comprender que es la ansiedad, sus orígenes, los tipos de ansiedad que existen, podrás identificar que tipo de ansiedad tienes y sabrás cómo aplicar las técnicas correctas para poder trascender y gestionar tus emociones, al grado de que ya no puedan afectar tu vida diaria.
Este libro de auto ayuda, contiene técnicas efectivas cognitivas conductuales, autohipnosis y regresiones para la autogestión de las emociones.
Una valiosa guía terapéutica diseñada para ayudar a adolescentes, adultos y mayores en el tratamiento y gestión emocional de conflictos como:
Ansiedad.
Depresión.
Estrés.
Tristeza crónica.
Insomnio.
Ataques de pánico.
Mediante este libro podrás lograr emprender el camino del despertar de la consciencia y accionar desde la mente profunda a las peticiones de tu alma.
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