Si quieres saber cuál es el origen emocional del vértigo, porque lo padeces o que te ha generado este padecimiento, tienes que leer este artículo.

El vértigo es una afección que parte del oído interno que es el órgano del equilibrio. En el cual produce una sensación de movimientos o giros que a menudo se describen como mareos.

Las personas con vértigo sienten como si estuvieran girando o como si el mundo “literalmente” estuviera dando vueltas a su alrededor. 

El vértigo se genera por diferentes causas, dependiendo si es periférico o central. En cualquiera de los dos casos, suceden por lesiones, padecimientos del oído, inflamación del nervio vestibular, enfermedades vasculares, convulsiones entre otros.

Pero cuando hablamos del origen emocional, las personas que sufren de vértigo es porque han vivido conflictos de pensamientos dispersos o descentrados, como por ejemplo: “estoy en una etapa de transición, estoy al borde del precipicio, se aproxima un cambio, pensamientos que van y vienen”.

El vértigo se presenta en personas que viven situaciones en las que tienen la impresión de perder la vertical, de perder el equilibrio que antes tenían, aún cuando la vida supuestamente equilibrada que tenia no respondiera necesariamente a sus necesidades. 

Sienten angustia ante la idea de tomar decisiones, de moverse de un lugar a otro, de mudarse de país, de cambiar de trabajo, de todo aquello que les imponga tomar algún camino o una decisión. 

Para las personas con vértigo es importante no alimentar el miedo. Reconoce tus necesidades y cambia los conceptos con respecto a lo que quieres vivir en la vida o lo que necesitas para vivir.

Mejora tu condición con los pensamientos de seguridad, confianza, aceptando que tu vida es perfecta, todo está y estará bien. Siéntete en paz con la vida y acepta incluso tus imperfecciones, siéntete a salvo y alegre aún y cuándo desees más, o esperes un cambio. Todo esta bien ahora y puede mejorar, pero por el momento, estás en equilibrio.  

Recuerda siempre no tener miedo de la voluntad de Dios, lo que ha de venir, vendrá siempre a mejorar tu vida, en algún aspecto. Siempre todo es para mejorar y evolucionar. 

Si te cuesta trabajo sentirte en coherencia y poder equilibrar tu vida, siempre es recomendable ir a terapia. 

Te espero con amor, siempre con la misión de ayudarte a sanar.